Pasos de la Causa de Beatificación y Canonización de M. Alberta
En el Decreto de la Congregación de las Causas de los Santos, firmado por el Papa en 1986, con el que se reconocieron las virtudes de fe, esperanza y caridad con Dios y con el prójimo; y también las cardinales de prudencia, justicia, templanza y fortaleza y las anejas a ella, que en grado heroico había vivido Madre Alberta, leemos:
“…demostró fortaleza de ánimo, sencillez de consejos, especiales dotes de mando, constancia en la acción, aceptación de las adversidades, eximias virtudes para educar, espíritu de madre y confianza en la Providencia y en la gracia divina. Quiso que su Colegio fuera el primero en los métodos de educación y en la novedad de los medios didácticos, y trabajó con todas sus fuerzas para que su orientación siguiese criterios verdaderamente católicos y fuera camino eficaz para conducir las almas a Dios. Observadora de las aptitudes de cada una de las alumnas, deseaba que todas adquiriesen una amplia y sólida cultura de inteligencia y alma para desempeñar lo mejor posible su futura misión en las familias y en la sociedad”.
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies
ACEPTAR