26 Ago Cuatro novicias profesan sus votos
Las novicias Dakota Pérez, Sara Gutiérrez, Geraldine Navas y Dariana Martínez han profesado hoy, 26 de agosto, sus votos temporales. Después de concluir su noviciado, esta tarde en la capilla del colegio Pureza de María de Sant Cugat han profesado sus votos de pobreza, castidad y obediencia. La eucaristía, presidida por Josep Jimenez, SJ y concelebrada por Josep Manel Vallejo, OFM ha sido celebrada a las 18h.
A la celebración de estas cuatro hermanas han asistido los familiares de Dakota, Sara y Dariana. También han querido acompañar a nuestras recién profesas algunos de sus amigos y compañeros. Por último han asistido las familias de algunas religiosas, las hermanas de la comunidad de Sant Cugat y las que participan en el encuentro anual de pastoral.
El camino recorrido por nuestras novicias comenzó hace tiempo. Geraldine y Dariana estrenaron el postulantado de Bucaramanga y más tarde vinieron a España para comenzar su noviciado. Dakota y Sara comenzaron su postulantado en Sant Cugat del Vallés y han realizado toda su formación en España.
Nuestras novicias nos han querido contar su experiencia del noviciado antes de iniciar sus primeros votos. Unos sencillos trazos de su experiencia durante estos dos años en Sant Cugat.
Dakota Pérez
«Si tuviera que definir el tiempo de noviciado en una palabra, sería «aventura». Dios siempre nos sorprende por donde menos lo esperamos y nos lleva por caminos que nunca imaginamos recorrer. Este tiempo me ha enseñado a contemplar el mundo desde los ojos de Dios y a poner en marcha su proyecto en Pureza de María. Estoy muy feliz por pertenecer a este pequeño cielo y por haber aprendido a amar a nuestra congregación. Gracias, Señor, por tantos dones recibidos y todo el amor compartido; hoy, como años atrás, vuelvo a decirte que SÍ.»
Sara Gutiérrez
«Me piden que cuente mi experiencia del noviciado… ¡Buf! No es cosa fácil. Cinco líneas y ya he consumido una (jajaja). Ha sido un tiempo completo totalmente: alegrías, dolores, sustos, risas, ganas de tirar la toalla, esperanza… Pero sobre todo ha sido un tiempo en el que, una vez más y a pesar de todos los impedimentos que pongo, Dios ha vuelto a ganar la pelea y me ha demostrado que es aquí y así donde quiera que VIVA. No ha sido fácil, pero esto es lo que me hace feliz. Gracias a la hermana Verónica y a todas las demás novicias que han vivido conmigo por su paciencia y por quererme como soy.»
Geraldine Navas
«Miro atrás y parece mentira todo lo vivido, ha sido tanto y a temporadas tan intenso. El noviciado ha sido el espacio-tiempo en el que el Señor me ha llevado a conocerme y conocerle de una nueva manera. Ha sido el “desierto” en el que su cuidado me ha recordado la mayor certeza en la que se puede sostener mi deseo de seguirle: su elección y amor son eternos, en eso puedo descansar. Agradezco a tantas compañeras de camino que el Señor me ha regalado en la comunidad del noviciado y en las que he podido encontrarle. Hoy, llena de alegría, vuelvo a decirle que Sí.»
Dariana Martínez
«Si el Señor no construye la casa en vano trabajan los albañiles; si el Señor no protege la ciudad, en vano vigila el centinela.» (Sal 127)
Tiempo de Gracia, lugar que es Hogar y Certeza en el corazón. Este tiempo ha sido momento de conocimiento personal, de aprender a dialogar, pero sobre todo de intimidad. Ha sido un tiempo para enamorarse y desear permanecer enamorada. No se trata ahora del final de un camino sino de la disposición para emprender el que será para toda la vida. Lo recorrido no ha sido sencillo, ha habido resistencias en mí pero el Señor y mis hermanas con su delicadeza y ternura se han servido de mis muros para mejorar la casa. Ahora solo pido que Él me ayude a permanecer, a estar en vela. Gracias a la H. Verónica por su paciencia. Gracias, también, a cada una de mis connovicias por soportarme, en el buen sentido, porque el “Amor todo lo soporta”. (1 Cor 13, 7)
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