14 Sep Clausura del 150 aniversario en Mallorca
Las comunidades de Mallorca vivieron el sábado 12 de septiembre un acontecimiento inolvidable en Valldemossa: la clausura de los 150 años de la primera comunidad de Pureza de María.
Espíritu de gratitud y oración
Durante la mañana, algunas hermanas se desplazaron al Monasterio de Lluc, santuario mariano de Mallorca. Allí pudieron disfrutar de la belleza de la naturaleza y vivir un momento especial de oración ante la Virgen.
Por la tarde se reunieron en Valldemossa hermanas de todas las comunidades de Mallorca para conmemorar juntas esta fecha tan significativa en nuestra historia y misión. El encuentro estuvo marcado por un profundo espíritu de gratitud.
La jornada continuó con las vísperas solemnes, un momento de oración compartida que unió en alabanza y acción de gracias al Señor por siglo y medio de camino recorrido.
Posteriormente, la comunidad se congregó en el patio del pozo, un lugar cargado de memoria y simbolismo. Allí elevaron cantos a la Virgen en un instante entrañable, sencillo y lleno de emoción. Fue un gesto que recordó la importancia de mantener viva la devoción y el espíritu de familia que caracteriza a la Pureza de María.
Celebración fraterna y envío
La fiesta de la clausura de los 150 años de Pureza de María concluyó con una merienda-cena típica mallorquina. En ella reinó la fraternidad y la alegría de sentirse parte de una misma misión. Este momento de comunión permitió revivir la riqueza de la tradición y el valor de caminar unidos.
Como signo de envío, cada hermana recibió una mini botellita con semillas, símbolo de la misión que continúa. Estas semillas representan el legado de Madre Alberta y la invitación a seguir sembrando, con confianza y buen ánimo, allí donde el Espíritu Santo conduzca.
Con profundo agradecimiento, las comunidades dieron gracias a Dios, a la Virgen y a Madre Alberta por este aniversario que impulsa a mirar al futuro con confianza y renovado compromiso.
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